El tantra requiere un tambor elaborado con la parte superior de un cráneo humano, sacrificar un caballo a Shiva, una ofrenda de soma y beber los posos de este soma mezclados con la sangre del caballo.
El conjuro también requiere algo que proceda del cuerpo de la víctima mortal (como cabellos o heces) que deberán arder en el fuego inmolador. El sadhu desaparecerá y se fundirá con la víctima en el lugar en el que ésta se encuentre. Este ritual se celebra en un altar de Shiva que el mago haya consagrado previamente y que se haya utilizado para venerarlo durante, al menos, un año.
Sistema: este ritual sólo funciona con humanos mortales (no surtirá efecto con nadie que posea algún tipo de poder sobrenatural) y, si el jugador del sadhu efectúa con éxito la tirada, éstos no podrán hacer nada por resistirse al poder. El ritual funcionará independientemente de la distancia a la que se encuentre la víctima. El efecto es similar al del poder de Dominación Posesión, aunque con ciertas ventajas y limitaciones. El sadhu podrá actuar libremente durante el día (su cuerpo no tendrá que mantenerse despierto porque no existirá), y podrá examinar los recuerdos de la víctima y utilizar sus habilidades. Si lo prefiere, podrá permanecer escondido y limitarse a compartir la mente y las experiencias de la víctima. Sin embargo, no podrá utilizar ninguna Disciplina. La posesión finalizará durante el siguiente crepúsculo: el sadhu reaparecerá en su propio cuerpo, en el lugar en donde celebró el sacrificio. Si lo desea, podrá finalizar voluntariamente la posesión antes del anochecer, pero deberá asegurarse de que el altar no está bañado por la luz del día. Cuando finalice la posesión, la víctima recuperará el control de su mente y cuerpo. El Narrador deberá decidir los efectos que sufrirá: si la posesión fue pasiva, es posible que sólo tenga algunas pesadillas, pero si el sadhu utilizó su cuerpo para llevar a cabo crímenes y actos execrables, puede que la violación espiritual le haga entrar en coma unos días o que sufra algún problema de Humanidad.
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