Sistema: el taumaturgo debe encontrar una víctima que el considere que posee una admirable virtud, como la inteligencia, la pureza o la reverencia. El debe ungir a su víctima con aceite, salvia y ceniza durante la hora que dura el ritual. En el clímax del ritual, el taumaturgo asesina a su víctima con el hueso del muslo de un ahorcado y luego consume su carne. El consumo de la carne permite al taumaturgo absorber la esencia de la víctima para reponer las necesidad de su cuerpo muerto y de su voluntad. El invocador sentirá una oleada de somnolencia y todas las tiradas dentro de la próxima hora se reducen a -1. Sin embargo, cada diez minutos que descanse el taumaturgo, recuperará un punto de Fuerza de Voluntad y un Nivel de Salud. Al final la noche si el taumaturgo no posee el mérito de comer alimentos, vomitara el exceso de carne. Este ritual es horrible, ademas el sacrificio debe saber que morirá y que luego sera consumido, una acción tan atroz afecta directamente la humanidad del taumaturgo, como su mente está inundada con los destellos de la vida de la víctima experimentara la agonía de su muerte. Quien use este ritual, debe hacer inmediatamente una tirada de humanidad (hasta un mínimo de 2), ademas el narrador puede solicitar una tirada de Conciencia (dificultad 8), si falla significa la pérdida de un punto de humanidad (que puede caer por debajo de 2) mientras que un fracaso podría significar una perdida aun mayor. El uso de este ritual requiere una tirada de Autocontrol (dificultad 8), el fracaso significa que el taumaturgo gana permanentemente el defecto de Adicción a la Carne Humana.
Ritual Nivel 05 - Camino del Wendigo
El Wendigo es un malvado espíritu carnívoro que posee a los mortales que practican el canibalismo. Una vez atado a un humano, corrompe el alma de su víctima hasta convertirla en nada mas que una bestia. Este ritual esta prohibido, fue desarrollado por un aprendiz tremere que sobrevivió a un asalto antes de la revolución americana, gravemente herido y agotado hasta el punto de desmayo, se deslizó por los Grandes Lagos, donde se alimentaba de la sangre de la gente, vivió allí y comenzó una practica ritualista alimentándose de la carne de sus víctimas. El desconocido aprendiz se dio cuenta que esta práctica curaba sus heridas y calmaba su voluntad. El Camino del Wendigo permite al taumaturgo no solo alimentarse de la sangre de una víctima si no también de su carne fresca para recargar su esencia a través de la vida de su víctima. Este oscuro ritual de magia siempre viene con un precio para el alma del taumaturgo, ya que cada vez que el vampiro se alimenta de la carne, la bestia se fortalece. Se dice que el tremere que creó este ritual se perdió irremediablemente en su bestia.
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