Sistema: Al terminar el ritual, el suelo se estremece por un momento indicando que tuvo éxito. El nigromante debe desenterrar el envase de vidrio, el cual ahora estará lleno de una neblina negra y purpura en la que se verán ocasionalmente manchas de luz, como una iluminación en miniatura. Cuando el nigromante abre la botella, cualquier espectro en la línea de visión del contenedor debe hacer una tirada de Fuerza (usando su Fuerza como cuando esta en las Tierras Sombrías) contra una dificultad de 6 más el número de éxitos obtenidos en la tirada de activación del ritual. Esta tirada se repite hasta que estén fuera de la vista del contenedor, si fallan son aspirados inmediatamente en el vórtice (dentro del envase). La Prisión de Tempestad puede contener una serie de espectros iguales a cinco veces el número de éxitos obtenidos en la tirada de activación. También dura un número de noches igual a cinco veces los éxitos en la tirada, después de lo cual el vórtice se invierte y los Wraiths son liberados. Esto también puede ser terminado prematuramente rompiendo el contenedor (que puede conducir de repente a tratar con una tormenta de fantasmas enojados). La Prisión de Tempestad no necesariamente tiene que ser utilizada por un nigromante después de haberla creado. Solo requiere un nigromante para crearlo, pero no para usarlo. De hecho muchos Giovanni que están llamados a una zona de interferencia fantasmal envían a sus "empleadores" con sus recipientes a recoger fantasmas molestos. Ellos entonces "disponen" de fantasmas desde otra parte, de tantos lugares como ellos requieran.
Ritual Nivel 03 - Prisión de Tempestad
Para pagar el diezmo de almas que exige Venecia, muchos nigromantes Giovanni vinculan Wraiths a un conjunto de objetos para enviarlos al mausoleo, sin embargo a medida que las demandas de los Ancianos se hacen mayores, algunos nigromantes han tratado de encontrar una forma de transportar un numero mayor de espectros en un solo envío. La Prisión de Tempestad fue la solución. El nigromante primero debe conseguir un gran recipiente de vidrio (como una jarra o un galón de vidrio) y llevarlo a un cementerio. Entonces entierra el recipiente sellado en la tierra sobre la tumba de alguien que murió prematuramente, o por violencia, o por cualquier motivo que signifique tener una buena oportunidad de crear un fantasma tras su fallecimiento (esto puede requerir un poco de investigación antes de realizar el ritual). Luego el nigromante ata la tierra con sangre mientras canta, invocando el poder de la tormenta, la que penetra profundamente dentro de la tierra de los muertos
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