Sistema: Para que un vampiro despierte la sangre mortal en su propio cuerpo, el jugador debe pasar una tirada de percepción + empatía (dificultad 7) el número de éxitos determina la claridad de las sensaciones. El "eco" en la sangre del mortal da impresiones de las cosas que esta sabía. Las imágenes pueden alertar del peligro en una zona determinada, o mostrar imágenes de la muerte de la víctima: cualquier cosa que supiera o sintiese el mortal se presenta al vampiro. Éste no tiene control sobre las visiones, y puede no ser capaz de entenderlas con claridad. Los Assamitas más hábiles, sin embargo, pueden evitar las distracciones y leer mensajes escritos en la sangre. Despertar la Sangre en otro vampiro usa el mismo sistema, pero con un efecto algo distinto. A menos que el vampiro haya sido sometido antes a esta disciplina, el despertar puede confundirle y desorientarle. Al manifestarse los recuerdos morales, el vampiro puede perder la pista de la realidad. Pasar una tirada de inteligencia + alerta (dificultad 7) evita la confusión: si la vícitma consigue más éxitos en su tirada que el Assamita en la suya, es capaz de distinguir la realidad de los recuerdos sanguíneos que corren por sus venas.
Nivel 08 - El Despertar de la Sangre
Algunos vampiros hablan de las sensaciones que "saborean" en la sangre de los mortales. Los Assamitas conocen esta esencia de vida residual, pudiendo apagar el eco de la mortalidad en cada gota de sangre. Estos cainitas extraen impresiones de sus víctimas mucho después de que éstas hayan expirado. El Despertar de la Sangre tiene dos efectos distintos, aunque relacionados. El primero permite al Assamita manipular la sangre en su propio cuerpo y recibir impresiones de la vida de una víctima mortal. En esencia, puede comunicarse con la sangre que hay en su cuerpo. El segundo efecto permite despertar la sangre en el interior de otro cainita. Este poder se usa para desequilibrar al contrario con falsas imágenes y sentimientos.
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