Personajes Ghoul en Vampiro

Aunque un personaje ghoul en una cuadrilla de vampiros parece estar en seria desventaja, no siempre es así. De acuerdo, el ghoul tiene menos aptitudes físicas y no puede aumentar sus facultades sobrenaturales con tanta facilidad.

Pero un ghoul puede moverse libremente a la luz del día, lo que supone una tremenda ventaja. Puede operar con normalidad en el horario habitual, haciendo tratos y comprando equipo especial. Si los demás personajes localizan el refugio de un enemigo, el ghoul es la opción perfecta para eludir a los guardias y decapitar al Cainita a la luz del día.

El desequilibrio de poderes entre Vástagos y mortales puede afectar el juego (sobre todo durante los combates y otras exhibiciones de fuerza). Si los camaradas vampíricos de un ghoul tienen problemas frente a las Disciplinas refinadas con los siglos de un antiguo, ¿que puede hacer un mortal?. Sin embargo, un ghoul listo puede sobrevivir a este tipo de situaciones (frecuentemente evitándolas).

A falta de esa alternativa, queda el recurso de convertirse en un blanco menos conspicuo: hace falta algo de trabajo para desviar la atención de un antiguo hacia otra víctima, pero es posible. No será fácil, ¿pero qué hay si no? Al menos, el personaje puede conseguir puntos de experiencia adicionales por sobrevivir a circunstancias adversas.

Juego de Grupo

Otra posibilidad es hacer que cada jugador cree dos personajes, uno ghoul y el otro vampiro. Los personajes de cada jugador pueden estar relacionados entre sí (como domitor y vasallo), o el grupo puede optar por interconectar los personajes vampiros y ghouls en redes más complejas. A medida que avanza la crónica, los jugadores alternan los personajes ghouls (durante las horas diurnas) con los vampiros (tras la puesta de sol). Hay muchas posibilidades de cambio, aunque los vampiros estén restringidos al turno de noche.

Una de las facetas más gratificantes de este tipo de crónicas es el cambio de mentalidad. Cuando llega la noche, los jugadores pasan de interpretar a mortales con sobrecarga emocional a asumir la personalidad de un verdadero depredador. Pocas combinaciones permiten que todo un grupo explore dos personalidades casi al mismo tiempo con una transición tan natural.

La diferencia en la percepción es igualmente admirable. Los rivales vampíricos de la cuadrilla se convierten en adversarios aterradoramente poderosos a los ojos de los ghouls. A la inversa, puede que los jugadores no se tomen tan a la ligera el descuartizar con las manos desnudas a los vasallos de un rival: saber que estos esclavos también tienen sentimientos puede atormentarles tras haber estado un tiempo en el lugar de los ghouls.