El miedo al fracaso corroe a muchos vampiros, afectando a todas sus acciones. Quizá superara a duras penas sus Ritos de Creación, o tuviera un encuentro cercano que le dejara al borde de la Muerte Definitiva. Podría tener en secreto una baja estima que le haga aspirar a metas cada vez mayores para lograr sentirse valioso. Sea como sea, el sobrecompensador hace todo lo posible para que todo lo que emprende sea un éxito espectacular.
Un personaje con este trastorno nunca se mete en nada sin una total convicción sobre el resultado. Todo merece un esfuerzo especial. Cada vez que surja algo significativo, el Cainita sobrecompensador debe gastar un punto de Fuerza de Voluntad para asegurarse el éxito. No es necesario hacerlo en todas las tiradas, pero sí en cualquier momento crítico. Sin embargo, a la hora de aplicar esta definición hay que tener muy en cuenta la Naturaleza del vampiro. Un Bravucón puede verse obligado a gastar su Fuerza de Voluntad en una pelea, mientras que el Camaleón lo hará en, las tiradas de Manipulación. Este gasto no se aplica a situaciones “genéricas” de tensión, sino solo a aquellas vitales para la personalidad del personaje.
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Buena pagina, una mina de información, buen trabajo!
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