07 de Octubre de 1991

He leído gran parte de las extensas notas del Dr. White acerca de la naturaleza de los vampiros. En el pasado se encontró con dos y sólo con coraje y con suerte fue capaz de destruir a uno de ellos. Sin embargo, aprendió mucho de uno de sus esclavos de sangre. Éste es el término que emplea para referirse a quienes, como quizás ahora Robert, están cautivos del hechizo de los vampiros. Los vampiros consiguen esto obligandoles a beber de su poderosa sangre. Se crea entonces una especie de vínculo del cual, asegura el Dr. White, las víctimas llegan a disfrutar con el tiempo. De hecho hay quienes buscan a los vampiros por este "don". Me horripila pensar en las cosas malvadas que este vampiro puede obligarle a hacer a Robert mediante un control tan impío.

Por este esclavo de sangre, el Dr. White averiguó algunos de los nombres y de las leyes que los vampiros usan entre sí. Se llaman a sí mismos Vástagos y sus víctimas mortales son el Ganado. También se hacen llamar Cainitas, pues se consideran los hijos de Caín tras su maldición.

Le pregunté al doctor si había alguna teoría científica que explicase la existencia y el poder de los vampiros, pero no la hay. Es doctor en teología y los estudia con la intención de integrarlos en el sistema de la Biblia. Sin embargo, yo quisiera creer que hay una explicación práctica para sus virtudes. Las supersticiones que les rodean tan sólo logran aumentar su poder. Si tan sólo desveláramos alguna desconocida ley de la naturaleza, no tendrían poder sobre nuestras mentes.

También se dividen en clanes o estirpes, al estilo de la aristocracia medieval europea. Los dos vampiros que encontró el Dr White eran del clan llamado Brujah. Estos Brujah, son aparentemente el brazo armado de los vampiros, los soldados y guerreros. El Dr. White cree que el vampiro que tiene a Robert es de un clan conocido como Toreador, que son los más sensuales de los no muertos. Los artistas son sus presas tradicionales y se rumorea que una gran parte del arte clásico se creó bajo el control de tales criaturas. Si hubiera sabido lo peligroso que era el arte, me habría puesto del lado de mi padre contra los deseos de RObert.

El Dr. White apoya gran parte del saber tradicional en torno a los vampiros. El que destruyó fue puesto fuera de combate con una estaca en el corazón. Dejó que su cuerpo se pudriera mientras perseguía al otro. Cuando se convenció de que éste había dado esquinazo, volvió para encontrar sólo cenizas en donde había dejado al vampiro empalado. Esto apoya la versión cinematográfica de que los vampiros se convierten en polvo al ser destruidos. El Dr. White no ha tenido aún la oportunidad de probar el agua bendita contra ellos y no tuvo el famoso crucifijo durante aquel encuentro, pero cree que estos objetos pueden ser tan eficaces como los otros.

El doctor me dijo que hay una organización de eruditos dedicados al estudio de los vampiros y otros seres de leyenda que en verdad existen. Se llaman a sí mismos el Arcanum, un nombre más bien raro pero impactante. El doctor me dio su número de teléfono y dirección en Washington D.C. y me ordenó que me pusiera en contacto con ellos si algo le sucedía. Dice que les abandonó cansado de su negativa a comprometerse activamente en la caza. ¿Cómo se puede conocer la existencia de tales criaturas sin tratar de detenerlas?. Hay tanto que aprender de ellos y tan poco tiempo para hacerlo. Debo confiar en mi astucia y en mi voluntad para poder arreglármelas.