No le he contado a papá lo que ha ocurrido, aunque ha insistido en pedirme una explicación por mi dejadez en la realización de mis asuntos del negocio. Sólo he podido evitarle porque está en las Bermudas. Si abandonase su retiro y volviese a casa, no sé como podría ocultarle esto. Seguramente creerá que estoy loca y echará las culpas al Dr. White. Y ya nunca podría salvar a Robert. No dejaré que papá me detenga en esto. Tengo que ser fuerte para enfrentarme a él, pero es tan agotador.
Dependiendo de los resultados de mañana por la noche, ésta podría ser mi ultima anotación Se hallará este diario junto con mi última voluntad y mi testamento y junto a documentos firmados que disponen que los negocios de mi padre estén seguros en manos de un asesor financiero de confianza. Esperad conmigo que haya más paginas que sigan a ésta.
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