Ishaq ibn Khayrat era un médico de Bagdad antes de que se fundasen los grandes hospitales. Incluso pese a la tradición islámica consistente en tener caridad con los menos afortunados, cuidar de los pobres y los enfermos era un gran desafío para los médicos como Ishaq que se sentían obligados a hacerlo. Mientras obedecía los dictados de su fe, contrajo una enfermedad degenerativa por sus pacientes empobrecidos, perdió a sus adinerados patrones e incluso a su familia y le abandonaron agonizante en los arrabales de Bagdad entre los pobres a los que había intentado ayudar. Su sire Khayrat, se encontró con él mientras estudiaba cómo retardar la muerte y se percató de su potencial.
Ibn Khayrat lleva metido en los asuntos del hospital de Azdi desde su fundación: en los documentos del diseño y los dibujos del arquitecto puede leerse su cuidada caligrafía. Aunque desde el principio le obligaron a mantener en secreto su naturaleza, su evidente progreso y sus poderes de persuasión le han hecho ganarse un puesto de cara al público en el personal del hospital. Sobrevive a base de donaciones de sangre de los doctores y alguna que otra vez a base de sangre aún enfriándose de algún cadáver recién muerto. En raras ocasiones, Ibn Khayrat entrega su sangre para mantener vivo a algún paciente moribundo, pero suele preferir que la naturaleza y la ciencia sigan sus respectivos cursos.
Ibn Khayrat considera los ropajes de influencia persa que se llevan en Seljuq Bagdad prácticos para su oficio: túnica hasta la pantorrilla con mangas estrechas con pantalones y botas blandas. Un turbante de color blanco inmaculado le cubre la cabeza.
Clan: Qabilat al-Mawt (Capadocio)
Generación: 9ª
Sire: Khayrat
Naturaleza: Autócrata
Conducta: Protector
Abrazo: 946 EA
Edad Aparente: Unos 40 años
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