Nahd ibn Raid vivía una vida plena, pero de repente cayó enfermo en su cuarta década. Se había ganado el respeto de su comunidad, había tenido muchos hijos de varias esposas y no le había faltado nada a ninguno. A pesar de toda su educación y convicción religiosa, no estaba convencido de todo lo que había hecho en vida hubiese sido suficiente para su alma, por lo que en su lecho de muerte clamó por otra oportunidad de mostrar su valía y su sire respondió a su llamada.
Ahora ibn Raid no está seguro de que haya hecho un buen trato. Desde luego tiene más tiempo para estudiar, para la caridad y para educarse, pero las puertas del Cielo parecen más lejanas que nunca, más distantes con cada transgresión menor del ayuno o la oración, y cada vez que otra vida se desvanece entre sus manos. Ibn Raid utiliza como muralla su conocimiento de leyes y tradiciones, intercambiando sus servicios por mucho menos de lo que podría pedir en un esfuerzo de conservar la viveza y sentido de su fe.
Hasta ahora no ha peregrinado a La Meca y por tanto no es uno de los Aja a pesar de su conducta devota. Teme que sus propias dudas acerca de la condición de su alma sólo sean confirmadas cuando intente aproximarse a las ciudades santas del Islam. Cuando está completamente vestido Ibn Raid parece casi normal, aunque sus extremidades están quizá un poco torcidas y su cara tiene algunas cicatrices. Sin embargo, su cuerpo bajo los ropajes, está cubierto de llagas supurantes, versiones exageradas de la enfermedad que casi le mató. Se cambia la ropa con regularidad, pero sigue siendo su olor y no su forma lo que deja claro su bay´t a los que le ven.
Clan: Bay't Mutasharid (Nosferatu)
Generación: 8ª
Sire: Raid
Naturaleza: Juez
Conducta: Penitente
Abrazo: 896 EA
Edad Aparente: Apenas 40
Si te gustó o fue útil no olvides compartir
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios:
Publicar un comentario