"La anestesia local todavía te hace efecto, así que no sentirás esto. Simplemente piensa en cómo debe de doler. Piensa en cómo la agonía te hará retorcerte cuando el efecto de la droga se te pase". En aquél campo de la muerte camboyano, Pelus había aprendido una cosa o dos sobre la tortura psicológica. No había tenido oportunidad de utilizarlas hasta hora. Rompió el último dedo sano de la mano de aquel Renfield. Naturalmente, el punk no se encogió, pero Pelus sabía que estaba asustado. Sus ojos estaban abiertos como platos y la mordaza de su boca estaba empapada en saliva. Probablemente hubiera hablado tres de dos antes, pero Pelus quería estar seguro. "Ahora, si no me dices dónde se esconde el Rey Lagarto, pasaremos a la mano derecha... y ya no me queda anestesia".
Tu personaje tiene la habilidad de controlar a los demás por medio del miedo. Este poder puede emanar de algo tan intangible como la fuerza de su personalidad o de algo tan real como el acero al rojo blanco y las tenazas. Tu personaje sabe la manera más apropiada de afrontar cada situación y puede que no tenga escrúpulos.
• Novato: un detestable deportista del instituto.
•• Practicante: un matón muy eficaz.
••• Competente: todo el mundo te llama "Señor".
•••• Experto: eres capaz de disuadir a unos ladrones frunciendo completamente el ceño.
••••• Maestro: puedes poner en fuga a una banda de mafiosos con una simple carcajada.
Poseído por: Fuerzas Especiales, Personal Militar, Gángsteres, Ejecutivos, Guardias de Seguridad.
Especialidades: Amenazas Veladas, Aire de Autoridad, Tortura, Inspirar Miedo.
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