Los Kiasyd no son, en absoluto, una Línea de Sangre; son
vampiros malditos de forma individual que se congregan
en grupos. Cuando un Cainita intenta Abrazar a
un humano tocado por las hadas, ya sea por
accidente o a propósito, el choque entre
naturalezas distintas normalmente mata a la
pobre criatura. En los raros casos en que
esto no sucede, la Vitae borra
todos los Poderes y recuerdos
relacionados con las hadas que
el nuevo Retoño pudiera haber
poseído antes y lo convierte en
un Kiasyd. Los Kiasyd son seres
apesadumbrados que sienten
que no encajan entre los Cainitas, incluso sin saber por qué.
Señalados como diferentes y
a menudo confundidos con
Caitiff, normalmente el resto
de Cainitas las rehuye, si no les
mata directamente.
Y encima,
para remachar el clavo, sus Sires,
horrorizados al haber creado tal
aberración, suelen encabezar la
lista de sus perseguidores.
Sin embargo, la Sangre de un
Kiasyd no es inerte, y le otorga la
capacidad de Abrazar y continuar su
linaje. El Chiquillo se convierte también
en un Kiasyd, pues la extraña mezcla de
sangre feérica y Vitae vampírica perdura de
Generación en Generación. Un Kiasyd con un
linaje establecido a menudo lo tiene un poco más
fácil, pues al menos dispone de un Sire que lo instruya
en sus primeros pasos.
Pero aun así ningún Kiasyd tiene
una existencia enteramente feliz, pues los otros Cainitas lo
reconocen como algo ajeno incluso sin la injerencia de un
Sire hostil avivando las llamas del prejuicio. Los raros Kiasyd que se las apañan para forjarse una
vida a menudo descubren que tienen una tendencia innata
para reunir y ocultar información. En un mundo donde el
conocimiento es poder esto les da cierta posición y puede
incluso permitirles reunir suficientes aliados y favores como
para mantener a raya a los Cainitas hostiles.
Sobrenombre: Extraños, Mariposas Rotas (Malkavian).
Apariencia: No hay un Kiasyd arquetípico, pero todos ellos
llevan una marca física que señala su parte feérica.
Puede ser sutil, como ojos heterocromáticos o un
sexto dedo en cada mano, o muy obvio, como
medir más de dos metros y tener la piel azul.
Refugio y presa: Los Kiasyd a menudo son descastados que eligen
edificios abandonados como
refugio y mantienen su ubicación celosamente guardada en
secreto, sobre todo de otros
Cainitas que pudieran suponer
un peligro. Para compensar esta
soledad, a menudo acumulan
amplias colecciones de bagatelas
y libros. Debido a que proceden
de tantos Clanes distintos, no
poseen una presa preferida. Los
Kiasyd procedentes de un linaje
establecido a menudo son Abrazado por su perspicacia social e
intelectual, así que suelen preferir
presas más débiles físicamente para
evitarse complicaciones.
El Abrazo: Los Abrazos de los
Kiasyd son dolorosos y trágicos. Cuando
un Kiasyd Abraza a alguien, su mezcla de
Vitae vampírica y herencia feérica amenaza
con destrozar al pobre Chiquillo, y le provoca
un período de angustia física y emocional que
puede durar semanas. Un Chiquillo suele ser elegido
por su excelente dominio de la etiqueta y su poder
intelectual con la intención de convertirlo en un buen
compañero o de que ayude al Sire a forjarse un lugar para sí.
Cuando un no Kiasyd Abraza a alguien tocado por las
hadas el resultado es aún peor, pues el choque entre naturaleza feérica y Vitae vampírica mata a la mayoría de Retoños
tras una breve y atormentada existencia. Además de las
escasas opciones del nuevo Kiasyd, su Sire, reconociéndolo
como distinto a él, a menudo lo rechaza o se aprovecha de
su debilidad inicial para deshacerse de él. Los pocos Kiasyd
supervivientes, por razones obvias, son un grupo ampliamente
variado que desafía cualquier generalización.
Un Kiasyd de nombre Marconius afirma haber sido un
Cainita antes de alterar su naturaleza con extrañas hechicerías. Si esto fuera cierto, da mayor validez al hecho de
que los Kiasyd no son verdaderos Cainitas. Por supuesto,
también puede estar mintiendo.
Disciplinas de Clan: Mythercería, más otras dos del
Clan original.
Debilidad: Debido a la marca de las hadas, la dificultad de
las tiradas para reconocer a un Kiasyd como algo ultramundano
desciende en 1 (más aún si la marca es muy obvia). Además,
su herencia feérica los hace vulnerables al hierro frío. No sólo
reciben daño agravado por armas de este material, sino que
también este daño desencadena una tirada inmediata para evitar
entrar en Frenesí o Rötschreck, según sea su Naturaleza.
Organización: Los Kiasyd se mantienen al margen de los demás Cainitas. Para aliviar su aislamiento
pueden unirse a otros de su estirpe, pero pronto se
percatan que tampoco pueden soportar su presencia
y muchos se separan poco amigablemente. No se dan
cuenta de ello, pero la incomodidad que sienten hacia
los demás Kiasyd se debe a su herencia destrozada;
les resulta doloroso estar cerca de ellos porque
son el recuerdo subconsciente de algo que
han perdido. Este dolor afecta incluso a Sire
y Chiquillo, por lo que los períodos de tutela
de los Kiasyd antes de que sea liberado el
Neonato suelen ser breves. Debido a que
son extremadamente raros es muy extraño que dos de ellos compartan siquiera
la misma ciudad. En esos casos, suele
tratarse de Sire y Chiquillo.
Cita: "Mi madre decía que los sueños no son reales. Pero las pesadillas sí".
Estereotipos
Capadocios: Heraldos de la muerte. Mi Sire es uno de ellos
y se aferra a mí como un vagabundo en el desierto a un oasis.
Lasombra: Uno de ellos me tomó por miembro de la
estirpe de Marconius y cree que le debo un favor. No lo
saqué de su error, pues me protege con la esperanza de que
en algún momento se lo devolveré.
Malkavian: Locos y despreciados como nosotros, no nos
juzgan. Buscamos su compañía y su sabiduría (ambas son únicas), pero somos conscientes de que pueden cambiar de humor.
Nosferatu: No somos más feos que ellos y aun así han
encontrado un hogar. No sé si admirarlos u odiarlos.
Salubri: Su contacto alivia el dolor. O
al menos antes lo hacía.
Toreador: Ven la verdad allí donde
debiera permanecer oculta. Son atractivos,
pero uno debe andarse con cuidado si no
quiere formar parte de su colección.
Tzimisce: Quieren abrirnos en
canal para ver cómo funcionamos. Es
algo feo, terrible.
Ravnos: Son como nosotros, pero
no del todo. ¿Parientes lejanos? Quizás
nos ayuden.
Si te gustó o fue útil no olvides compartir
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios:
Publicar un comentario