En las ciénagas y pantanos de las orillas del Rin, en el Imperio Germánico, habita una línea de sangre de Nosferatu conocida como los Volsi, entre los que se cuentan algunos de los miembros del clan más antiguos de Europa que se encuentran actualmente activos.
Según los rumores son los antiguos nativos de la zona, o quizás los dioses que adoraban antes de la llegada del cristianismo.
Se cree que en el pasado los Volsi eran más numerosos y puede que forzaran a los mortales de la zona a practicar el canibalismo. Se dice que fueron uno de los motivos por lo que los antiguos romanos se negaron a asentarse en Germania. Los romanos estaban tan atemorizados por lo que vieron que hasta el propio Julio César prohibió a sus tropas avanzar más allá del río Elba. El hermano del emperador Tiberio, Nerón Druso, afirmó haber visto una gran giganta junto a la ribera del río, que le advirtió que no regresara y que predijo su muerte.
Tal y como cuentan las leyendas los Volsi son auténticos gigantes entre los Nosferatu, y alcanzan con facilidad la estatura de un oso.
Sus uñas y dientes son como el hierro y sus ojos arden como brasas salvajes desde la profundidad de sus cuencas; en ocasiones incluso se los confunde con los Gangrel. Debido a que duermen en el fondo de ciénagas y pantanos, su cuerpo a menudo se encuentra recubierto por un manto de cieno y raíces como un manto de color verde enfermizo. Sus cuerpos emiten un hedor fétido debido al tiempo que pasan en el agua estancada. Son criaturas incivilizadas e incultas, pero poseen una salvaje astucia y fuerza que los convierte en oponentes peligrosos.
Si te gustó o fue útil no olvides compartir
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios:
Publicar un comentario