La Capacidad de Asombro
Reflexiona un instante sobre las ramificaciones de esa experiencia. Éste eres tú, una persona como cualquiera. Llevas una vida bastante normal, con tus intereses personales y tus aficiones, algunos sueños y decepciones, quizá una familia y posiblemente unos cuantos problemas graves. De repente, la vida da un giro inesperado y trágico y la muerte entra en escena. ¿Cuáles son tus últimos pensamientos? ¿Contrariedad? ¿Alegría? ¿Miedo? ¿Escepticismo? ¿Perplejidad? ¿Rabia? ¿Horror? ¿Alivio? ¿Resignación? Mientras tu vida entera pasa en una serie de instantáneas delante de tus ojos, ves como se acerca el fin y entonces la muerte con la claridad que sólo puede proporcionar el tenerla delante de las narices.
Pero no se acaba aquí. ¿Cómo reaccionas a eso? Se supone que deberías estar muerto. ¿Qué harás con todos esos problemas que creías haber dejado atrás? ¿Qué le dirás a tu familia y amigos? Entonces te das cuenta de que te estás fundiendo con algo extremadamente viejo, mientras te ves arrastrado (o algo te arrastra) a alguna tierra lejana donde un extraño culto hace algo con tu cuerpo y te dicen que ahora vivirás para siempre. Te dicen que has sido elegido como afro para una vida más positiva y dinámica. ¿Y ahora qué? ¿Les crees? ¿Te quedas alucinando? ¿Sientes alegría? ¿Miedo? ¿Escepticismo? ¿Perplejidad? ¿Rabia? ¿Horror? ¿Alivio? ¿Resignación? ¿Un poco de todo?
Cierras los ojos y cuando los abres ya no eres el mismo. Sabes que no eres tú del todo. Esas conversaciones que mantienes en la cabeza, esa sensación de que eres tú, es diferente. De repente ves el mundo con más perspectiva. Sientes rasándote la piel las ropas que llevas (posiblemente con las que falleciste), con la suavidad de la tela artificial. Te incorporas o intentas alcanzar las gafas y de repente te das cuenta de que los colores que te rodean parecen estar vivos. La luz del mundo baila sólo para tus ojos. Moho, sudor y ancestrales perfumes confunden tus fosas nasales, pero puedes incluso oler la esperanza que yace en tu transformación. Te das cuenta de que te has perdido estas sensaciones del mundo mientras vivías. Quizá tenias miedo de que la inmortalidad fuese aburrida, pero esto… esto es más de lo que nadie podía esperar. Mientras que los humanos son máquinas de aprender, tú te has convertido en una criatura de sensaciones. ¿Qué te hace sentir esta transformación? ¿Quieres reír a carcajadas con este nuevo placer? ¿Temes que los demás no puedan comprenderlo? ¿Y que opinas del hecho de que te tiente dejarte llevar por pasiones oscuras, pero la parte de ti que no eres tú te da fuerzas, incluso contra tus propios deseos? Y, lo más importante, ¿a dónde vas ahora?
Seguir Adelante
A la momia le han dado esa segunda oportunidad que tanto deseamos todos. Le han concedido una nueva vida completamente diferente. Está libre de las debilidades que antes le acosaban, pero pueden conservar elementos de su anterior vida que elija. Puede volver con la familia que ama, pero con su nueva determinación, convicción y poder no tiene por qué tragar mierda de esos parientes que abusaban de él o de ese trabajo asqueroso. Además, la momia posee nuevas metas y responsabilidades. La mayoría de la gente no está preparada para asumir que ahora son inmortales defensores de Maat, hipersensibles y dotados de magia, especialmente dado que todas estas personas tenían importantes debilidades o problemas antes del cambio. La típica momia puede ser insegura, vacilante, incluso poco dispuesta a adoptar su papel, pero la primera vez que muera de nuevo, los Jueces de Maat lo sacarán de nuevo a colación y aquí es donde se hallan las semillas del conflicto interno de la momia. ¿Confía en la orientación de sus benefactores y se dispone a defender el equilibrio, o se deja llevar por los placeres egoístas que nunca había tenido en consideración antes? ¿Cómo reconcilia su existencia sobrenatural con sus anteriores creencias religiosas uy sobre el más allá? ¿Y qué ocurre con la magia? ¿Practica sus nuevos poderes místicos, los rechaza o tan solo intenta ignorarlos y llevar de nuevo una vida normal? Acostumbrarse a tantas novedades no es fácil ni rápido.
Al final la momia tendrá que aceptar su nuevo estado y sus nuevos colegas. Unidos por Maat, un grupo de momias no contará con mucho tiempo para hacerse a su nueva existencia. Todos morirán antes o después y las responsabilidades de su naturaleza inmortal se harán patentes. Aunque la momia puede verse tentada a volver a la familia antigua y los viejos hábitos, sólo la podrán comprender las demás momias. Quizá la momia tenga un hijo y un amante con el que ya no puede identificarse, y se vea más atraído a otras momias, o ponga en peligro a sus amigos y su familia cuando los acólitos de Apofis le busquen. ¿Qué le queda a una momia que no quiere dejar cabos sueltos en su Segunda Vida y descubre que todo lo que ama ha sido devorado por uno de los Apepnu?
Tarde o temprano la momia debe afrontar el cambio que ha experimentado. No importa cuánto quiera aferrarse a su antigua vida, ésta se ha acabado tal y como la conocía. Debe encontrar una nueva motivación que le impulse a través de incontables reencarnaciones. Para muchos, buscar Maat es su motivación, pero es más fácil decir que en teoría lo haces que hacerlo en la práctica. Las momias están tentadas por sus dones. Con una eternidad para jugar, duran más que cualquier persona o problema que les obstaculizase. ¿Cómo puede experimentar de verdad una momia cariño, generosidad, compasión y amabilidad por personas con las que ya no tiene nada que ver? Mientras el mundo sigue girando, la momia se va distanciando cada vez más de su anterior existencia también. Por esta razón muchas momias se vuelven extremadamente entusiastas en si impulso de proteger a Maat y persiguen a sus enemigos con fanatismos, tan sólo para mantenerse ocupadas. Durante este proceso algunas cometen atrocidades al intentar encargarse de los malvados. La búsqueda del equilibrio es siempre un compromiso difícil y la momia debe tener cuidado con que lo que haga sea defender la virtud, no simplemente aniquilar a gente con vicios.
Atar Cabos
Tus primeras historias con personajes de momia deberían dar la oportunidad a tus jugadores para que exploren todas estas posibilidades y los pasos de sus momias en el mundo terrenal. Comienza con un preludio que desemboque en la transformación de la momia. Añade algunos fragmentos de la vida mortal del personaje que acaben en su muerte. Comprueba si el personaje está asustado, aliviado o preocupado y luego narra toda la confusión de la unión y el posterior peregrinaje. Explora el Hechizo de la Vida, el primer viaje del espíritu dual a la presencia de los Jueces de Maat y el regreso a la vida. Habla del despertar en el nuevo mundo y el posterior adoctrinamiento como inmortal. Igual que cualquiera que se haya dado cuenta de repente de alguna verdad grande y terrible, la momia puede al principio rechazar la experiencia. Pero con el tiempo llegará la aceptación.
Habla sobre los principios de Maat, el conflicto en las creencias personales de la momia y quizá de los motivos del culto. Al fin y al cabo, la gente no tiene a nadie más a quién recurrir para aprender más acerca de sus nuevas capacidades. Algún hechicero desesperado podría intentar usarla como peón, incluso al tiempo que le enseña lo que necesita saber. Después del preludio, concéntrate en cómo se enfrenta la momia a su anterior vida. La mayoría intentará seguir en contacto con sus vidas pasadas y descubren finalmente lo lejos que están ahora de ellas. Para algunos es un descubrimiento trágico, pero para muchos es liberador. Nada puede evitar que la momia visite a un pariente o amante de cuando en cuando, pero ahora es un trotamundos, una persona dotada de poder e influencia, capaz de tomar sus propias decisiones y establecer sus propias metas. Deja bien clara la sensación que tiene de la Segunda Vida de la momia y luego deja que el jugador decida cómo reacciona el personaje cuando se la arrebatan inexplicablemente y luego se la de vuelven en la Tercera Vida.
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