Las conexiones
que cultiva un Ventrue ambicioso suelen ser una
recompensa en sí misma para sus compañeros de
coterie, ya sea en forma de criados hábiles y ambiciosos, aliados bien conectados o amplios y lujosos
recursos. ¿Necesitas cerrar un cruce para impedir
una ruptura de la Mascarada? ¿Expropiar el refugio
de un rival? ¿Blanquear dinero de un trato en los
muelles? Un Ventrue hábil puede hacer eso y mucho
más; sólo tienes que pedirlo.
Eso no quiere decir que el Ventrue sea una varita
mágica para resolver los problemas temporales de
la coterie. No se cultiva un Clan de Reyes, construyendo con cuidado redes que se extienden por siglos
con Ghouls, mortales dispuestos y Neonatos que
actúan como ojos y oídos en cada nivel del gobierno
y la aristocracia local, haciéndole los recados a quienes son menos capaces que uno. Después de todo,
Dios creó a Ghouls y mortales para que hicieran
el trabajo sucio. La premisa de la participación de
un Ventrue en una coterie es ocupar una posición
de valor, y si ese Sangre Azul termina convirtiendo
la coterie en una filial voluntaria de Ventrue S. A.,
bueno, la coterie debería haber dicho antes que tenía
problemas con esa valiosa propuesta.
●● Legados Vampíricos (Mérito de coterie de Clan): Los Ventrue entienden que el legado
de un vampiro conlleva el recuento de los hechos
de sus progenitores. Para algunos Sangre Azul, esto
toma la forma de historias escritas mientras que
otros pueden tener ciertos Sires o eruditos entre sus
conocidos. Se manifieste como se manifieste, una
vez por sesión, un miembro de una coterie con un
Ventrue que tenga este Mérito puede pedir al Narrador que revele algo de información relevante sobre la
historia de un único vampiro con el que haya estado
en contacto. Esto podría ser algo específico como «el
Ministro dueño del club sacó a fugitivos Anarquistas de la ciudad tras una revuelta en Los Ángeles»,
o algo más misterioso como «las alegaciones contra
el Sire del Sire del Sire de este Vástago de que había
cometido Diablerie eran falsas, pero su Chiquillo
aún carga con esa vergüenza».
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