El Sheriff asegura que se cumplan las Tradiciones y los
decretos del Príncipe, caza a quienes los violan y les castiga de forma justa. En el caso de violaciones menores o de
enemigos conocidos de la Camarilla, el Sheriff suele estar
autorizado para actuar tanto como juez y como carcelero-ejecutor, pero cuando se cometen grandes ofensas,
entrega al acusado a la corte para que sea juzgado.
Los Sheriffs han de ser cazadores e investigadores
superlativos. Hay muchas formas de hacer el trabajo,
pero los mejores Sheriffs son calculadores, agudos
y despiadados.
Tras el resurgimiento de la Revuelta
Anarquista y con la importancia añadida de mantener
la Mascarada, nuestros Sheriffs deben vigilar cualquier
signo de insurgencia, sin miedo a golpear cuando la
encuentren.
En los dominios mayores, el Sheriff y el Senescal
pueden compartir el puesto de jefe de Inteligencia,
repartiéndose la información y los rumores de potenciales traidores. Un dominio en el que los dos trabajen
juntos podrá derribar rápidamente a cualquiera que
difunda mentiras sobre nuestra orden o trate de iniciar
una revuelta de cualquier tipo.
Deberes del Sheriff:
■ Proteger la ciudad de sí misma.
■ Localizar y castigar delincuentes.
¿Crees que siento placer cazando a delincuentes y malhechores?
¿Crees que disfruto cortándoles la cabeza según la tradición,
colocando los cráneos en picas fuera del Elíseo para que todos vean
qué les pasa a los subversores? Bien, pues tienes razón. Deberían
haberlo pensado antes de romper nuestras leyes.
– Hermana Jane, Sheriff de Copenhague
Ejemplos de Sheriffs vampíricos:
Josefine Adelbrant: Vieja policía de Gotemburgo que descubrió demasiado sobre los Cainitas mientras trabajaba en las calles de la ciudad y huyó. Una manada Anarquista a la que había estado investigando la persiguió hasta Estocolmo, sólo para enfrentarse con una coterie de perros guardianes de la Camarilla que los vigilaba. El líder de esa coterie la protegió durante un tiempo y luego la Abrazó en 1985, para luego convertirse en Sheriff (o “Brandvakt”) de la ciudad. Josefine fue su leal Chiquilla hasta que él pereció en un fuego provocado por Anarquistas a los que disgustaban sus métodos, y ella apenas escapó con no-vida. Desde entonces ha ocupado el puesto de Sheriff que ostentaba él. Astuta y fiera combatiente, no tolera a los mentirosos, los criminales ni los charlatanes Anarquistas.
Nick Kilpatrick: Neonato de Duodécima Generación. Trabajó como agente de fianzas en el negocio familiar antes de ser Abrazado en 1944 por su hermano Arthur (ahora desaparecido). Kilpatrick sirve como Sheriff de Cincinnati, protegiendo la ciudad contra todo tipo de caos y juego sucio. Adora su trabajo y es conocido por su entusiasmo por castigar cualquier forma de transgresión, sin esperar siempre a que el Príncipe transmita su juicio antes de hacerlo. Cómo hábil criminal, a pesar de su “trabajo de día” como Sheriff de la corte, aún usa de forma ocasional sus capacidades para reventar cajas fuertes y abrir alguna cámara acorazada. Proclive a tener brotes de depresión, a veces tiene tendencias suicidas y se siente profundamente avergonzado de su adicción a alimentarse de adictos al crack y otros drogadictos para obtener su dosis. Su extensa familia es su principal debilidad. Trata de ocultarlos lo mejor que puede, pero Fianzas Kilpatrick es una compañía bien conocida y en una ocasión su abuela fue secuestrada por una banda Anarquista. Aunque no recuperó viva a su yaya, la banda desapareció por completo sin dejar rastro.
Josefine Adelbrant: Vieja policía de Gotemburgo que descubrió demasiado sobre los Cainitas mientras trabajaba en las calles de la ciudad y huyó. Una manada Anarquista a la que había estado investigando la persiguió hasta Estocolmo, sólo para enfrentarse con una coterie de perros guardianes de la Camarilla que los vigilaba. El líder de esa coterie la protegió durante un tiempo y luego la Abrazó en 1985, para luego convertirse en Sheriff (o “Brandvakt”) de la ciudad. Josefine fue su leal Chiquilla hasta que él pereció en un fuego provocado por Anarquistas a los que disgustaban sus métodos, y ella apenas escapó con no-vida. Desde entonces ha ocupado el puesto de Sheriff que ostentaba él. Astuta y fiera combatiente, no tolera a los mentirosos, los criminales ni los charlatanes Anarquistas.
Nick Kilpatrick: Neonato de Duodécima Generación. Trabajó como agente de fianzas en el negocio familiar antes de ser Abrazado en 1944 por su hermano Arthur (ahora desaparecido). Kilpatrick sirve como Sheriff de Cincinnati, protegiendo la ciudad contra todo tipo de caos y juego sucio. Adora su trabajo y es conocido por su entusiasmo por castigar cualquier forma de transgresión, sin esperar siempre a que el Príncipe transmita su juicio antes de hacerlo. Cómo hábil criminal, a pesar de su “trabajo de día” como Sheriff de la corte, aún usa de forma ocasional sus capacidades para reventar cajas fuertes y abrir alguna cámara acorazada. Proclive a tener brotes de depresión, a veces tiene tendencias suicidas y se siente profundamente avergonzado de su adicción a alimentarse de adictos al crack y otros drogadictos para obtener su dosis. Su extensa familia es su principal debilidad. Trata de ocultarlos lo mejor que puede, pero Fianzas Kilpatrick es una compañía bien conocida y en una ocasión su abuela fue secuestrada por una banda Anarquista. Aunque no recuperó viva a su yaya, la banda desapareció por completo sin dejar rastro.
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