Benevolencia

Todos los sabios están de acuerdo: es bueno ser amable, ofrecer ayuda cuando se puede y curar el sufrimiento siempre que es posible. Dada la miseria del Reino Medio, siempre hay oportunidades para ser benévolo. Y, como hasta los más crueles discípulos el Tigre-Diablo pueden atestiguar, no hay nada tan bueno y puro como un acto desinteresado.

La benevolencia puede adoptar diversas formas; algunos Kuei-jin forman Cortes para beneficiarse de los mortales a su alrededor, a los que ayudan con su dinero y apoyo. Otros Catayanos ofrecen por sorpresa la misericordia o el perdón a enemigos o subordinados que han fallado. También los hay que cometen "actos ocasionales de gentileza y belleza": regalar comida o dinero a extraños necesitados, etc. En cualquier caso, la acción nunca se realiza par obtener alguna ganancia a largo plazo; aunque una sociedad o una persona agradecida siempre pueden ser de ayuda más tarde, el regalo en sí se da a cambio de nada. De este modo el monstruo se redime mediante la generosidad.