El feng shui (en chino "viento y agua") es la práctica de la geomancia, el arte de la coordinación armónica de los edificios y sus entornos con los espíritus de la tierra y las líneas naturales de fuerza y poder. Antes de construir ningún edificio, en Hong Hong y en el resto de China se lleva a un conocedor del feng shui a la zona para que halle las fuerzas naturales y determine si el proyecto del arquitecto se adapta a las corrientes de la tierra.
En Hong Kong, esta práctica se toma con una extrema seriedad. Se considera que los fang shih (los practicantes del feng shui) son tan importantes como los arquitectos, y reciben grandes sumas por su trabajo. La palabra de un fang shih es ley en la ciudad a la hora de edificar, y esta tradición suele provocar extraños resultados cosméticos: edificios curvos en forma de S, huecos de varias plantas en medio de un rascacielos, atrios acristalados de hasta diez plantas de altura y otras innovaciones que serían consideradas horrendas en Occidente. Aunque estas modificaciones dan un aire único y cómico al paisaje de Hong Kong, tienen motivos bien definidos: no interrumpir las líneas energéticas, facilitar el crecimiento de los árboles en los jardines e incluso permitir que los dragones celestiales puedan observar la bahía sin obstáculos.
En algunos casos las modificaciones feng shui son instigadas por algún Kuei-jin, como un golpe kármico contra el territorio de un rival. Los fang shih conocen verdaderos rituales y fórmulas para fortalecer o debilitar la Muralla de una zona. Construyendo un edificio según estos principios místicos, el lugar se llena con energía armónica y disminuye la Muralla en uno o dos. Por el contrario, si se disponen espejos y otros objetos a modo de protección, un fang shih puede aumentar la Muralla del lugar en uno o dos, evitando la entrada de "espíritus malvados".
Algunos Kuei-jin han estudiado una versión propia del feng shui, viajando a Hong Kong para practicar sus conocimientos. Este arte, denominado Tso Tao (el "camino negro), es empleado para alinear las tumbas de los Kuei-jin adecuadamente con las líneas de energía, para determinar el mejor modo de construir un refugio o incluso para encontrar cuevas ocultas en las vastas zonas rurales de China. Por el contrario, la situación incorrecta de estas fuerzas o líneas Chi (o su manipulación) tiene efectos perjudiciales para los Catayanos, tanto espiritual como físicamente.
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
0 comentarios:
Publicar un comentario