Al sur de la Plaza de Tiananmen se encuentra el mausoleo que alberga el cuerpo del Camarada Mao, arquitecto de la China moderna. El monumento ocupa una posición privilegiada en el eje norte sur de Pekín, pero en un desafío a la geomancia habitual china, está encarado al norte. Durante el día siempre está lleno de ancianos añorantes y turistas que crean una interminable cadena de plegarias y lamentos.
Sin embargo, por la noche el mausoleo es un lugar mucho más siniestro. En vida de Mao y en la cumbre de su poder los chinos decían que su mujer, Jiang Qing, era en realidad un espíritu zorro. Para los Kuei-jin no es solo un rumor. Muchos de ellos, incluidos el Ancestro Ch'ang, creen que Jiang Qing sobrevivió a su sentencia de muerte y que aún recorre Pekín por las noches. Se dice que ha hecho del propio mausoleo su hogar, descansando bajo el cuerpo de su marido y alejada de los ojos curiosos de los mortales. Si esto fuera cierto sería un golpe devastador para Ch'ang y para el resto de los Kuei-jin de la ciudad, ya que se dice que Jiang alimenta el Chi corrupto que fluye del mausoleo, haciéndose más fuerte con sus poderosas magias negras. Ch'ang y el resto de la jerarquía de Pekín ya se están preparando contra una posible revuelta de los wu más jóvenes de la Corte de Sangre, por lo que además de vigilar a los extranjeros tienen que cuidarse de sus propias filas.
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