Para los Kuei-jin establecidos, todos ellos son una peligrosa amenaza en tanto que abrazan credos heréticos. Cuando se les descubre son cazados, despreciados y declarados akuma; e incluso así, muchos lugares del mundo acogen a estos estudiantes de tan excéntricas artes arcanas y los mantienen lejos del alcance de las cortes Kuei-jin y los ojos mortales. Aprender las herejías no es tarea fácil; un Catayano debe tener sus propias predilecciones e instructores. La relativa escasez de herejías significa que los acontecimientos fortuitos son los tutores más comunes de los Monos Corredores.
Un discípulo recién levantado puede encontrarse a sí mismo siendo instruido en los Dharmas alternativos por un hereje cercano si no se presenta ningún otro representante de la sociedad Kuei-jin. Instruidos en modos de pensar y costumbres ajenas a las de las cortes, los discípulos heréticos son a menudo susceptibles a sufrir fuertes traumas cuando se encuentran con la sociedad Catayana.
Sistema Para los Dharmas Heréticos
Muchas de las herejías se basan en virtudes combinadas, como por ejemplo el equilibrio entre Hun y P'o. En tales casos, todas las tiradas de sendero Dhármico se realizan con la media de las dos puntuaciones, redondeando hacia arriba si es necesario. Los Dharmas Heréticos no tienen números de la suerte; por tanto, para sus Horóscopos solo disfrutan de los números de su Dirección; tal es el precio de seguir un camino fuera de las confluencias de la astrología de las cortes. El progreso en las herejías funciona como en cualquier otro Dharma: el Kuei-jin depende de los caprichos del dên. Sin embargo, la carencia de grandes recorridos entre estos Dharmas significa que hay pocos ancestros a lo largo de estos caminos. En consecuencia, los herejes a menudo no pueden confiar en el entrenamiento, teniendo que forjar su avance de los pedazos de iluminación que puedan recuperar de la historia.
0 comentarios:
Publicar un comentario